Plan de acción del sector de la automoción

Plan de acción del sector de la automoción

La industria automovilística es un motor clave para la prosperidad de Europa, representando 1 billón de euros de su PIB en el año 2024, un tercio de la inversión privada en I+D de la UE y empleando a 13 millones de europeos. España es el segundo mayor fabricante de automóviles europeo y el sector de la automoción representa el 10% del PIB español en el año 2024 y es responsable del 18% del total de las exportaciones españolas en ese mismo año.

A pesar de que históricamente Europa ha sido un referente global, en los últimos años ha enfrentado serios problemas de competitividad debido a una transformación estructural sin precedentes, y es que, en el año 2024, uno de cada cinco coches vendidos es eléctrico, lo que acelera el cambio hacia una movilidad limpia. El sector ha tenido que adaptarse a nuevas tendencias como la integración de tecnologías digitales en los vehículos, tales como la IA, los softwares y los dispositivos de detección y comunicación.

Sin embargo, los productores europeos enfrentan desventajas frente a competidores globales como Estados Unidos y China, y se encuentran ante riesgos en la cadena de suministro, dependencia de materias primas y baterías. Asimismo, en el plan de acción para el sector europeo del automóvil (el “Plan de Acción”), se puede observar la intención de simplificar y aplazar las políticas en materia de sostenibilidad instauradas por la UE a causa de la situación política externa actual así como por la reciente publicación de la propuesta del primer Paquete Ómnibus, cuyo propósito es el de no sobrecargar a los empresarios europeos con excesivas obligaciones en materia de sostenibilidad de manera que no quede reducida su competitividad en el mercado.

En respuesta a estos desafíos, la Comisión Europea presentó el pasado día 5 de marzo de 2025 la propuesta del Plan de Acción, basado en su Brújula para la Competitividad y su Pacto para una Industria Limpia. El Plan de Acción establece medidas para garantizar la competitividad global de la industria de automoción europea y fortalecer la producción, actuando en cinco ámbitos 1) innovación y digitalización, 2) movilidad limpia, 3) competitividad y resistencia de la cadena de suministro, 4) competencias y dimensión social, y 5) igualdad de condiciones y entorno empresarial.

 
1. Innovación y digitalización
Para ser competitiva a nivel global, la industria de automoción europea debe recuperar con urgencia una posición de liderazgo en la transición hacia vehículos conectados y autónomos habilitados por software e impulsados por inteligencia artificial.

Para ello la Comisión ha propuesto establecer al menos tres bancos de pruebas transfronterizos a gran escala, entornos regulatorios controlados y Corredores Europeos de Conducción Automatizada. Asimismo, la Comisión desarrollará un marco regulador para vehículos autónomos.

Los componentes clave para los vehículos del futuro son los chips, el software y la inteligencia artificial. A pesar de que Europa lidera las inversiones en I+D en la automoción, enfrenta competencia de empresas tecnológicas y nuevos competidores digitales fuera del continente. Por ello, la Comisión lanzará la Alianza Europea de Vehículos Conectados y Autónomos.

 
2. Movilidad limpia
La estricta normativa europea CAFE (“Clean Air For Europe”) establecía que, para finales de 2025, las emisiones promedio de dióxido de carbono (CO2) de los automóviles vendidos en la UE debían reducirse a 93,6 gramos por kilómetro, lo que representa una disminución del 15 % respecto al límite de 110,1 gramos vigente entre 2021 y 2024.

La Comisión Europea ha comprendido que los requisitos respecto a las emisiones debían ser más permisivos, ya que las marcas europeas no solo tendrían que afrontar multas de hasta 15.000 millones de euros, sino que la industria europea quedaría en desventaja frente a otras potencias. Por ello se ha decidido ampliar el plazo para cumplir con los objetivos de reducción de emisiones en el sector automovilístico, de uno a tres años.

Otro asunto que destaca el Plan de Acción para el sector de la automoción es la pobre infraestructura existente para la carga de vehículos pesados en los depósitos y a lo largo de los corredores clave de autopistas. La Comisión propone desarrollar la Iniciativa del Corredor de Transporte Limpio Europeo, que acelerará el despliegue de centros de carga para vehículos pesados a lo largo de los corredores logísticos clave en la Red Transeuropea de Transporte (TEN-T).

 
3. Competitividad y resistencia de la cadena de suministro
Para ayudar al sector del motor a aumentar su competitividad con respecto a otras potencias que puedan estar ganando una gran influencia en el mercado global, la Comisión pondrá a disposición 1.800 millones de euros para dar soporte a las compañías productoras de baterías en la UE y la Comisión presentará durante el mes de marzo de 2025 un listado de Proyectos Estratégicos cubriendo la producción de materias primas para baterías en todas las etapas de la cadena de valor.


4. Competencias y dimensión social
Los recientes cambios en la producción y la demanda en la economía global, así como los choques económicos, los riesgos geopolíticos y las incertidumbres, han afectado significativamente al empleo en el sector de la automoción de la UE. Es por ello por lo que la Comisión propone medidas para incentivar el empleo a lo largo de la cadena de valor de la automoción europea.

 
5. Igualdad de condiciones y entorno empresarial
La Comisión quiere implementar medidas para igualar las condiciones con los otros mercados de automoción y promocionar la colaboración entre estos trabajando en garantizar que las inversiones extranjeras en el sector contribuyan de manera más sólida a la competitividad a largo plazo de la industria de la UE.

El marco regulador existente impone una carga excesiva y costos desproporcionados a la industria, especialmente a las Pymes de la cadena de suministro y del mercado de posventa. Por ello, la Comisión consultando a los grupos de interés del sector del motor, llevará a cabo una simplificación regulatoria para el sector de la automoción, mejorando la coherencia y consistencia entre los diferentes requisitos regulatorios.
Próximos pasos

La Comisión informará al Parlamento y al Consejo de la Unión Europea sobre el Plan de Acción y las acciones propuestas y les requiere que permitan la rápida aplicación de las enmiendas específicas propuestas. Asimismo, la Comisión continuará colaborando con los grupos de interés convocando diálogos periódicos con el objetivo de recabar sus perspectivas sobre la implementación de las medidas previstas en el Plan de Acción a corto y medio plazo.