LA GUERRA DE RUSIA Y UCRANIA Y SUS EFECTOS EN LA AUDITORÍA DE CUENTAS ANUALES
LA GUERRA DE RUSIA Y UCRANIA Y SUS EFECTOS EN LA AUDITORÍA DE CUENTAS ANUALES
La auditoría de cuentas anuales está ligada a la evolución de las empresas y, por ello, en los últimos dos ejercicios ha experimentado unas exigencias adicionales a las que ya rodean de por sí a esta actividad, motivadas, en primer lugar, por la evaluación de los impactos de la pandemia originada por el Covid-19 en las sociedades objeto de auditoría y, ahora más recientemente, por la evaluación de los impactos de la guerra de Rusia y Ucrania.
El pasado mes de marzo el ICAC publicó un comunicado sobre el impacto en la actividad de auditoría de las medidas restrictivas adoptadas por la Unión Europea en respuesta a la crisis en Ucrania, instando a que los auditores y sociedades de auditoría aplicaran los procedimientos necesarios para la identificación de todos aquellos clientes de auditoría que, efectiva o indiciariamente, estuvieran afectados por las sanciones impuestas por la Unión Europea destinadas a los sujetos así como a las personas físicas o jurídicas, entidades u organismos asociados a ellos, responsables de acciones que menoscaben o amenacen la integridad territorial, la soberanía y la independencia de Ucrania. En caso de que un cliente de auditoría estuviera afectado por estas sanciones, los auditores deberán adoptar las medidas de respuesta necesarias que garanticen el cumplimiento de toda la normativa aplicable.
A efectos de la auditoría de las cuentas anuales del ejercicio 2021, hay que tener en cuenta que la guerra de Rusia y Ucrania es un hecho acontecido con posterioridad al cierre de ejercicio y, por tanto, inicialmente sus efectos, en términos de auditoría, serán menores que los que se produzcan para los ejercicios iniciados con posterioridad a dicho cierre.
Entre las consideraciones principales que los auditores tendrán en cuenta en relación a los efectos de la guerra de Rusia y Ucrania en las auditorías de cuentas anuales correspondientes a los ejercicios cerrados a 31 de diciembre de 2021, estarán:
- La evaluación del principio de empresa en funcionamiento, teniendo en cuenta, en su caso, si los hechos y circunstancias derivados del conflicto bélico son de tal importancia que pudieran afectar a la capacidad de la entidad para continuar en el futuro.
- La información a revelar, en su caso, en la nota de hechos posteriores de la memoria de las cuentas anuales en cuanto a la naturaleza de este hecho posterior, así como la estimación de su efecto financiero o, en su caso, la imposibilidad de realizar tal estimación.
Ahora bien, como se ha indicado anteriormente, las consideraciones e implicaciones de la guerra de Rusia y Ucrania serán más significativas, en su caso, en las auditorías de cuentas anuales correspondientes a los ejercicios con cierres posteriores al 31 de diciembre de 2021 donde no sólo habrán de considerarse los efectos en términos del cumplimiento del principio de empresa en funcionamiento sino que los auditores tendrán que prestar especial atención a los efectos del conflicto bélico en áreas sujetas a juicio y estimación, entre otras, las siguientes:
- Deterioro de activos financieros: se deberá prestar mayor atención en la valoración posterior de activos (créditos comerciales, inversiones en empresas etc) en el caso de empresas con vinculación comercial en Rusia y Ucrania.
- Posibles roturas de stock: el encarecimiento de productos tales como el gas, el aceite de girasol, los cereales y determinados metales como el hierro, el acero o el aluminio ya es una realidad, lo que puede provocar que los sectores dependientes de estos materiales tengan que adaptar su oferta a estas nuevas circunstancias y vean reducida su rentabilidad.
- Posibles cambios en las estimaciones sobre la vida útil de los activos: en caso de producirse interrupciones en el flujo de materias primas, se podrían dar situaciones de infrautilización de inmovilizados y, por tanto, tener que plantearse, entre otros, si aplicaría reconocer un alargamiento en la vida útil de los mismos.
Los auditores han demostrado, en términos generales, su gran capacidad de actuación ante los retos impuestos por la situación provocada por el Covid-19 y, una vez más, tendrán nuevamente que aplicarla, en esta ocasión, para el análisis de los efectos de la guerra de Rusia y Ucrania, dando respuesta a los nuevos riesgos que puedan plantearse en los trabajos de auditoría de cuentas anuales derivados de esta situación.